El Ayuntamiento de Erla deberá indemnizar a la empresa Aluteam con más de 550.000 euros por los perjuicios ocasionados a la empresa en el incumplimiento del convenio firmado en 2005 entre esta firma, que se dedicó entre 2007 y 2009 a la fabricación de componentes para vehículos, y el consistorio. Una sentencia del juzgado número 4 de lo contencioso administrativo ha dado la razón al empresario, al considerar que la falta de energía eléctrica y de gas en el polígono impidió el desarrollo de la actividad industrial.
La sentencia no es firme y tanto el consistorio como la empresa han presentado los correspondientes recursos. Desde el ayuntamiento de esta localidad, su alcalde, Jesús Sánchez, confía en que las apelaciones presentadas al Tribunal Superior de Justicia de Aragón dé la razón al municipio. A través de los servicios jurídicos de la DPZ, "se ha apelado todos los puntos a los que al ayuntamiento le condenaban", dijo Sánchez, quien añadió que "no obstante, hasta que el TSJA no dirima en una nueva sentencia en firme no se pueden hacer cábalas de ninguna manera".
Aluteam, por su parte, considera que la indemnización propuesta es muy baja y reclama un pago que supera los 950.000 euros. "Nos vimos muy perjudicados por la falta de suministro de determinadas energías porque los terrenos que el ayuntamiento nos vendió subvencionados no estaban dotados, tal y como se había comprometido, de las acometidas correspondientes para poder tener la energía tanto eléctrica como de gas que la empresa necesitaba", señaló el abogado de esta compañía, Víctor Palacios. "No se ha podido trabajar, era imposible por la falta de energía, la falta de pavimentación del exterior de la parcela", apuntó.
La empresa comenzó su actividad en precario en el 2007, utilizando el generador electrógeno de la comarca (con potencia insuficiente) para su producción durante varios meses, y llegó a Erla de la mano del entonces consejero de Economía, Eduardo Bandrés. En el acuerdo firmado en 2005, la firma hispanoalemana, con capital de Schulz Ibérica y grupo Schneider, se comprometió a crear 52 puestos de trabajo en cinco años.
Además, Aluteam se comprometió a realizar una inversión de al menos cuatro millones de euros en dos años y permanecer un mínimo de diez años. Según esta firma, llegó a los seis millones de euros en la construcción de la nave para lo que recibió ayudas públicas del Gobierno de Aragón. Cesó su actividad en junio de 2009 tras dos años de trabajo y varios expedientes de regulación de empleo, en los que argumentó falta de productividad a consecuencia de la caída de la demanda. Tuvo un máximo de 30 trabajadores. La empresa entró en proceso concursal en el 2009 y en liquidación en el 2010.
(Extraído de la web de El Periódico de Aragón)